Croacia rompió el molde del grupo D y a pura estrategia le ganó el duelo a Argentina 3 a 0.
Sampaoli anunció ayer que iba a jugar con línea de 3 en el fondo y el DT croata hizo la lógica, puso a Modric en el centro del armado y desde su derecha mágica se aburrió de meter pases a las espaldas de los volantes externos que no se enteraron que tenían que defender también.
El primer tiempo fue parejo, cada uno con sus armas, aunque la pólvora de los argentinos parecía mojada.
Caballero, el villano más sencillo, tapó una clara antes del cuarto de hora. Era un aviso de lo que se venía.
Messi cobraba peaje e iban todas a él, pero los croatas no son como los defensas del Espanyol, el Celta de Vigo o el Deportivo La Coruña. Estos fueron derecho a cerrarle la zurda e impedirle cualquiera de sus tiros letales. Todo esto ante la mirada de sus compañeros, que soltaban la pelota para que Leo se encargue.
Vale decir que después de ver que una vez más Messi tenía a 4 arriba no se la dieron más, o no la pidió más. Por un momento parecía que había pateado la pelota fuerte para arriba como al final del juego contra Islandia pero a los 30 minutos de juego.
Perisic imponía su ley en el medio a base de mucha fuerza y alguna patita fuera de lugar. En este mundial parece que hay orden de «siga siga» y bajar un cambio con las tarjetas.
A los 8 del segundo tiempo se quebró el partido. Caballero devolvió mal un pase. No supo leer el momento entre hacer un pase arriesgado o reventarla. Se le valora la confianza en su habilidad, pero para colmo Rebic se la colocó de volea por encima. Un golazo.
El puesto es el más ingrato, pero es solo parte del descalabro argentino.
Llegaron los cambios y la desesperación del DT se demostraba en los cambios. Croacia le daba vida al desaprovechar 2 o 3 contragolpes.
A 10 del final Modric demostró su calidad con un golazo de afuera del área y final del duelo.
El tercero fue un gol de partido de gordos de fútbol 5. El golero revolcado por el piso y 3 para definir ante el único que no quedó pidiendo offside.
Croacia dio una lección de estrategia, juego colectivo y calidad individual desarrollada apoyada en un equipo.
Los argentinos siguen esperando que Messi resuelva todo, pero se olvidaron de generar juveniles, mejorar la liga local y darle una estructura seria a la selección. Para qué? si Messi es crack y merece ganar un mundial.
Croacia se anota para Octavos de final también por adelantado. En la última rueda sabremos en que puesto.
Argentina depende de la impericia de otros para ver si tiene chances (una victoria de los nigerianos es lo que le sirve para depender de sí). El problema que para avanzar tendrá que ganar su próximo partido.
Rusia 2018 sigue premiando a los equipos, a los que juegan como tal más allá de las individualides. Los cracks definen, es cierto, pero cuando hay equipo.
La gente de Davor Suker son los Padres debe estar muy contenta.

Obdulio no grita los goles de otros,
Obdulio son los padres