Se viene el partido por Octavos de Final contra Portugal y Obdulio les deja este recuerdo para ir haciendo base.
Uruguay venía de perder en el debut ante Costa Rica y los ingleses habían empatado con Italia. El partido definía la suerte de ambos y en Uruguay una fiera volvía herida tras una recuperación más que rápida tras la operación de meniscos.
Un partido memorable para todos los uruguayos.
La mano venía complicada. Los ingleses habían tenido sus chances, y Uruguay no generaba mucho, pero a los 38 minutos, una fiera andaba suelta:
El tipo volvía de una artroscopía en tiempo récord, tenía su momento en los Mundiales, y no se olvidó de la persona que pese a estar en un momento muy complicado de salud lo asistió para su recuperación: Walter Ferreira.
Cuando pienso en Suárez como ese jugador que te hace el gol imposible o que debido a su carácter puede complicar a su equipo, me acuerdo de esta imagen. El tipo se acordó de quien lo ayudó en las malas cuando él estaba en su momento cumbre. Mis respetos.
Al minuto 61, Palito Pereira fue a barrer la pelota, pero el puntero inglés lo esquivaba hábilmente, y sin querer chocó su rodilla con la cabeza de nuestro lateral.
Por un momento todos los que lo mirábamos por TV nos olvidamos del partido, y veíamos como Palito estaba tendido en el pasto sin reacción. Para peor, Godín empezó a masajearle el pecho.
Por suerte se incorporó, pero salió a los tumbos. El Dr Pan hacía el gesto inequívoco «cambio», pero el jugador dijo «no! no salgo!», y reingresó a la cancha, a seguir peleando con los suyos porque el partido venía feo.
Sterling, el culpable involuntario del golpe salió lesionado enseguida, y el de celeste seguía de pie.
Pese a todo, Rooney pondría el empate cuando el partido tenía ya 75 minutos. Un balde de agua helada para los nuestros. Ellos lo merecían.
Pero Uruguay no se iba a ir del Mundial tan rápido y aplicó su arma secreta, la jugada patentada del proceso: saque largo de Muslera, peinada y jugador que aprovecha el hueco para irse rumbo al arco. Gol!
Suárez en su noche soñada le perforaba el arco a Hart. Según declaró después del partido, ya estaba acalambrado y sentía pinchazos por todos lados. Esa corrida la hizo con el combustible que le quedaba en la reserva.
En Sudáfrica 2010 nos posibilitó el pase a semifinales con su recordada mano ante Ghana y dos goles en Octavos contra Corea, en 2014 tuvo su partido soñado contra los ingleses pero cometió un error en el partido con Italia y lo echaron de Brasil como a un delincuente.
¿Qué nos espera para Rusia 2018?
Ojalá lo mejor esté por llegar.
¡Vamo’ arriba Uruguay!
Obdulio recuerda,
Obdulio son los Padres
OBDULIO SON LOS PADRES 