Obdulio suele compartir historias sobre fútbol y de vez en cuando usa como disparador alguna cosa que haya visto o leído por ahí. En este caso la serie de NETFLIX «Juego de Caballeros» (The English Game) es la excusa para seguir hablando sobre los orígenes del foot-ball.
Prepárese, que Obdulio vino con ganas de escribir celebrando con un post especial.
El fútbol surgido a mediados del Siglo XIX, fue en principio un juego para calmar a los muchachos de colegios ingleses que necesitaban descargar energías y parece que alguno notó que patear una pelota le bajaba las revoluciones a las fieras.
En Octubre de 1863 se creó la Football Associaton (FA) y fueron escritas las primeras trece reglas de este hermoso deporte siendo la base de las que conocemos hoy en día.
Estas reglas sufrieron variantes y en 1868 se creó la Inernational Football Association Board, que hasta hoy en día revisa y ajusta las reglas de juego por encima de FIFA.
JUEGO DE CABALLEROS (The English Game).
Estrenada en Netflix en marzo de 2020
La serie en cuestión cuenta como el fútbol se volvió masivo y a su vez profesional a partir de la decisión del dueño del equipo de Darwen FC en pagarle a futbolistas por jugar.
En una época donde los equipos brotaban por todos los puntos de Gran Bretaña, la clase obrera comenzó a jugar un papel fundamental para expandir el foot-ball por toda la isla, y luego fuera de fronteras.
Darwen FC, creado en 1870, nació en una fábrica de procesamiento de algodón y sus empleados tenían equipos de rugby, cricket y desde 1875 habían incluido el foot-ball.
Fue el primer equipo de clase obrera en llegar a los cuartos de final de la FA Cup, enfrentando al campeón defensor: Old Etonians.

Los jugadores de Old Etonians (equipo que también existió) eran unos muchachos de clase acomodada que veían como el juego que ellos habían ayudado a reglamentar se les estaba yendo de las manos debido a su expansión por el territorio. Más allá de cuántos lo jugaban, su preocupación pasaba por quiénes lo hacían.
Los hechos que se detallan en la cancha son basados en hechos reales tanto como sus dos protagonistas, Arthur Kinnaird (Edward Holcroft) y Fergus Suter (Kevin Guthrie).
El estilo de juego de Old Etonians era bien inglés, buscando avanzar en «manada» para vencer a los rivales a puro entrevero. Obdulio les recuerda que por aquellos tiempos no había lugar para gente que se tirara en busca de faltas. Estos hombres de bien se reventaban a patadas sin chistar los sábados por la tarde.
Los capitaneados por Kinnaird eran los campeones defensores y en aquel partido fueron sorprendidos por Darwen que contaba con Suter en sus filas.
Suter llegó junto a su amigo Jimmy Love desde el Patrick FC de Escocia a cambio de dinero por jugar y fueron disimulados por el dueño de la fábrica como dos empleados más. Cobrar por jugar estaba prohibido en la Football Association.
Fergus Suter es considerado el primer jugador que cobró por jugar al fútbol y su forma de jugar revolucionó el fútbol inglés.
Darwen FC consiguió un hazañoso empate a 5 (luego de ir perdiendo 1-5) contra Old Etonians pero los buenos muchachos dueños de la pelota pudieron hacer uno de sus últimos berrinches y se negaron a jugar el alargue pactando la revancha para la siguiente semana (no eran tontos, sabían que iban a perder).
La serie se divide entre el fútbol, la lucha de clases y las historias de los protagonistas dentro y fuera de la cancha.
El fútbol comenzó a penetrar en las masas y ya el equipo no era el de la fábrica sino el de la ciudad, generando una pasión inesperada por parte de los habitantes que lo adoptaron como propio.
El periplo de Suter fue mucho más largo en Darwen de lo que se muestra en la serie, y el salto temporal llega a 1882 cuando el drama y los hechos reales se mezclan hasta llegar al partido por cuartos de final de Darwen contra el Blackburn (en realidad Blackburn Olympic).
Los hechos posteriores me los reservo y se los dejo para el disfrute de la serie.
Arthur Kinnaird, por otro lado, debió enfrentar sus problemas personales que van desde la relación con su padre, su esposa y sus amigos futbolistas. Ese tipo que tal vez uno cree que va a odiar en los primeros minutos de la serie se termina robando la escena siendo el real protagonista.
Los dilemas morales, las necesidades familiares, la amistad y las rivalidades atraviesan las clases sociales y se mezclan sobre la última parte de la trama que termina siendo atrapante.
El fútbol profesional tuvo su origen y para aquellos interesados por su historia ésta es una muy buena recreación de época para disfrutar en tan solo seis capítulos.
Las consecuencias y la historia de los protagonistas de esta serie se las dejo para que la descubran al final del último capítulo.
Algunos paralelismos con el origen del fútbol en nuestras tierras:
Interpretar los hechos que se dieron hace más de 130 años requiere el esfuerzo de ubicarse en el contexto para no caer en simplismos que terminan en discusiones innecesarias.
Además de Inglaterra, el Río de la Plata fue uno de los focos más importantes para el desarrollo del foot-ball. No sorprende la cantidad de anglicismos utilizados para los nombres de las asociaciones de fútbol y sus equipos. De Gran Bretaña provienen las reglas, los estilos de juego, la forma en la que surgieron varios equipos y la pasión de los hinchas.
El estilo de juego
Suter aplicó la variante escocesa en Darwen, que implicaba retrasar al centrodelantero y hacerlo jugar más con los otros cuatro forwards. Esa variante hizo que el juego escocés fuera efectivo para contrarrestar las manadas británicas que iniciaban en el centreforward, la punta de lanza del equipo.

Haciendo un paralelismo para nada rebuscado, el escocés John Harley llegó a Uruguay desde Argentina, y su trabajo en la Central Uruguay Railway Company fue clave para el cambio del estilo de juego en el fútbol uruguayo jugando para el C.U.R.C.C. (Peñarol).
En Argentina el fútbol había mutado del estilo directo de los ingleses hacia un juego de pelota a ras del piso a finales de Siglo XIX, lo que hizo una gran diferencia en nuestros primeros enfrentamientos con los vecinos del Plata.
Las andanzas de Harley por Uruguay fueron contadas por Obdulio en El estilo uruguayo: del pelotazo al cortita y al pie
El origen de los clubes
El surgimiento de equipos como Darwen dentro de una empresa fue de las cosas más comunes en Inglaterra.
Por ejemplo, Manchester United surgió en 1878 bajo el nombre de Newton Heath LYR Football Club, creado por los empleados de carga de la Lancashire and Yorkshire Railway Company. Luego de una grave crisis financiera el club se independizó de la empresa y cambió su nombre por el que hoy conocemos todos en el mundo.

Por nuestras tierras del Río de la Plata, las fábricas fueron sustituidas por barcos y trenes. Por los puertos llegaron los británicos, que penetraron el territorio a través de las vías férreas, trayendo entre tantas otras cosas este deporte que 150 años después sigue siendo el más popular del mundo.
El mismo proceso de creación de los equipos con transiciones más o menos conflictivas sucedió en Argentina y Uruguay. Sin entrar en polémicas, los casos de Rosario Central y Peñarol son muy similares. Ambos surgieron de una empresa de ferrocarril y cambiaron su nombre luego que el equipo trascendiera las fronteras de la empresa.

En el caso de Rosario Central (Central Argentine Railway Athletic Club), fundado en 1889, se separó de la empresa y cambió su nombre en 1903. En el caso de Peñarol (Central Uruguay Railway Cricket Club), fundado en 1891, tuvo un proceso similar pero entre 1913 y 1914. El primero adoptó el nombre de su ciudad, el segundo el del barrio de origen que era como lo llamaban todos.
Talleres e Instituto, ambos de Córdoba tuvieron historias que se emparentan con los arriba citados. Algo más lineal fue el caso de Ferrocarril Oeste que mantiene su nombre desde el origen, obviamente ferroviario.
La pasión de los hinchas
Ya a finales del Siglo XIX, la pasión de los seguidores de los equipos ingleses fue preocupación de las autoridades. Las gradas de los incipientes estadios servían para el aliento de los players y de vez en cuando sacarse las ganas a piñazos con el vecino molesto.
En su post Uruguay en la Copa América. Parte I Obdulio nos contó como el estadio de Gimnasia de Buenos Aires fue prendido fuego por los hinchas que desbordaron las instalaciones para ver partido final de la primera Copa América entre Argentina y Uruguay en 1916. El match se terminó jugando al día siguiente en otro estadio. Está claro que por aquellos tiempos no se suspendían los campeonatos por minucias.
Más allá del estilo de juego, el origen de los equipos o el comportamiento de sus simpatizantes, no se puede dudar que aquel «juego de caballeros» trascendió todas las barreras sociales, económicas, políticas y culturales imaginables.
Dentro de la cancha son simplemente once contra once.
La magia de la pelotita se expandió por el mundo y logra, por ejemplo, que un mediocre arquitecto dedique parte de su tiempo libre a escribir sobre el fútbol y sus peripecias, en este caso celebrando su post 400.
A todos los lectores de Obdulio son los Padres, muchas gracias por su compañía.
Un abrazo desde el lejano norte.
Obdulio recuerda y reflexiona,
Obdulio son los Padres
Obdulio cita sus fuentes:
https://en.wikipedia.org/wiki/Darwen_F.C.
https://www.mirror.co.uk/sport/football/news/english-game-how-darwen-fc-21759190
https://en.wikipedia.org/wiki/List_of_FA_Cup_Finals
https://en.wikipedia.org/wiki/Fergus_Suter
https://en.wikipedia.org/wiki/Arthur_Kinnaird,_11th_Lord_Kinnaird
https://es.wikipedia.org/wiki/Manchester_United_Football_Club#Primeros_a%C3%B1os_(1878-1902)
https://www.manutd.com/en/history/history-by-decade
https://www.rosariocentral.com/institucional/nuestros-origenes/
Muy buena semblanza Don Obdulio. Interesante sugerencia para ver!!
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Muchas gracias, estimado. Obdulio le envía un saludo
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