La Celeste clasificó a los cuartos de final de la Copa América de forma burocrática, jugando sin caja de quinta la mayoría del partido y le hizo precio a Bolivia errando goles en cantidades insospechadas para los mejores delanteros de la historia moderna del fútbol uruguayo.
Suele decirse que el Maestro Tabárez ha «desperdiciado» a la mejor generación de futbolistas de la historia de la selección uruguaya, y no es por defender al troesma, pero hoy fueron los jugadores solitos los que la pudrieron y no lograron embocarle al arco durante casi todo el partido.
Obdulio se preparó para ver la recuperación de su querida selección uruguaya, pero quedó con la amargura de ver que el equipo no aprovechó la oportunidad de golear, dar un golpe de autoridad en el torneo y posicionarse mejor en la tabla gracias al saldo de goles.
El partido fue todo de Uruguay y se lo puede resumir en tres partes bien claras: la incapacidad para definir oportunidades de gol culminada por la amabilidad de la zaga que se la terminó metiendo de puros buena onda, el ingreso de Bentancur a los 16 del segundo tiempo y la presencia de Torres en el tramo final del partido.
De Arrascaeta aprovechó mejor su oportunidad desde el vamos y de sus pies llegó el centro del primer gol y alguna que otra jugada que en combinación con los dos de arriba lograron hilvanar.
Nández fue la figura de la cancha (eso habla mucho del partido), y a pura garra, corazón y habilidad levemente cadenciosa generó peligro por derecha mientras que De la Cruz se encargó de alfombrarle el ingreso al próximo de la fila en el sorteo que hace Tabárez para decidir los acompañantes de Vecino y Valverde en el medio.
El inicio del segundo tiempo fue más de lo mismo hasta que entró Bentancur y le dio un poco de mejor trato de pelota y contención al medio, frenó el impulso boliviano tras el ingreso de Martins y se dio el lujo de hacer volar a Lampe para la foto con un tiro muy bueno desde afuera del área.
El partido se iba con jugadas de fútbol 5 y la intención de hacer un gol en el área chica para que valga como en los picados informales donde Suárez juega de golero. Por momentos fue un partido similar al de Chile Bolivia en eliminatorias pero en slowmotion.
Bolivia se empezó a desordenar atrás y faltando 20 entró el Facu Torres para descomprimir las cosas y por izquierda liquidar a la defensa rival a pura velocidad y habilidad.
El gol de Cavani es el resultado de esa nueva intención de la Celeste que no paró de errar goles luego del segundo de Uruguay, incluyendo uno en la hora de Maxi Gómez insólito (¡Damiani, pagale a la bruja, por favor!)-
Lo más importante fueron los tres puntos y la confirmación de Torres como revulsivo en la celeste.
vamos derecho al unoxuno porque Obdulio se me está por dormir:
MUSLERA: Hoy vestido de mantel de casa playa diseñada por un daltónico, pero rojo. Si no fuera por un par de tiros bolivianos ni me enteraba de tamaño mal gusto del goalkeeper.
NÁNDEZ: Dando lo que uno siempre espera de él: todo y un poco más. Se fajó por derecha, se proyectó al ataque y mostró el camino para zafar de la telaraña defensiva rival. Los compañeros no le dieron mucha bola.
JOSEMA: En la jugada anulada de Ramallo, parecida al gol de Vargas seguro iba pensando «este Godín me va a hacer la misma todos los partidos, voy a tener que pedirle al maestro que le ponga a Cáceres del otro lado».
GODÍN: No fue su partido más flojo, pero ya viene siendo hora, ¿no?
VIÑA: Buen partido por izquierda, con poca ayuda de De la Cruz se las ingenió para subir y hacer de las suyas.
VECINO: Contra Bolivia, impeca.
VALVERDE: Juega cuando quiere y no se frustra.
DE LA CRUZ: Jugó casi todo el partido pidiendo el cambio y lo logró como a casi todas las pelotas que quiso pasar o cortar: tarde.
GIORGIAN: le puso onda y provocó el primer gol. No se conforma el que no quiere.
EDIN: Hora de dormir con las manos ataditas.
SUÁREZ: Pese a no hacer gol, fue el menos discreto de los dos. Salvo Akinfeev, todos los arqueros sabe que tira los tiros libres al palo del golero desde esa posición.
BENTANCUR: Entró bien, mejoró el mediocampo y terminó homenajeando al personaje célebre de Kafka con las patitas para arriba al final del partido, tirado como un oficinista liquidado tras una hora intensa de fútbol 5.
TORRES: Le puso dos velocidades extra al ataque y arregló todos los problemas en ataque (igual erró sus golcitos para no desentonar)
GIO: Entró para que aplaudan a Nández por Zoom
MAXI: Entró para recordarnos que Suárez sale de la selección en camilla o no sale.
Volvimos a ganar, se consiguió el primer objetivo. Quizás ahora sin tanta presión y algo más liberado puedan ponerse las pilas y aspirar a algo más que los cuartos de final de la Copa.
Obdulio no erra (porque no patea)
Obdulio son los Padres
OBDULIO SON LOS PADRES 