La preparación para la Copa del Mundo es un desafío para los DTs de las selecciones. Pocos partidos de aquí hasta el inicio de Catar 2022 determinan que salvo que tengan muy claras las cosas, deban darle la oportunidad de mostrarse a la mayor cantidad de jugadores posibles para sacar sus conclusiones.
Eso muchas veces se da de frente con lo que queremos ver los hinchas.
Seguramente Uruguay pudo presentar un equipo titular más competitivo esta tarde en el Children’s Mercy Park de Kansas City, pero entre los equilibrios que el DT debe hacer con la vieja y la nueva guardia, más la necesidad de ver a algunos jugadores en acción transformaron al equipo del tornado en una leve brisa que ni siquiera dio para refrescar esta tarde calurosa en las tierras donde vive nuestro cronista estrella..
Obdulio se pone la 10 de Gorriarán, y a media máquina escribe este reporte más el unoxuno de los esforzados atletas vestidos de celeste.

La típica línea de 5 para cerrar partidos ésta vez fue la elección desde el «vamos» para Diego Alonso.
Muslera en el arco, el regreso de Varela tras casi cuatro años lejos de la selección, la vieja guardia de Tabárez de centrales (Josema, Godín, Cáceres) y Viña por izquierda; Ugarte, Arambarri y Gorriarán se dividieron la mitad de la cancha (y las puteadas), mientras que el TITÁN Núñez estuvo en el ataque acompañado por Maxi Gómez (que sigue cobrando la beca obtenida con el gol contra Chile en la hora en el primer partido de Eliminatorias).
Después de un inicio con buena presión y avances por derecha por parte de Varela, Uruguay se enredó en sus limitaciones para generar fútbol, y tras algunos ajustes de Estados Unidos por el sector izquierdo, el equipo local se adueñó del match cuando Pulisic pasó de jugar como extremo por izquierda para aparecer más por el medio y combinarse mejor con Weah, una pesadilla por derecha durante 20 minutos.
En los minutos iniciales a Godín le sacaron una en la línea tras un tiro de esquina, más algún que otro centro peligroso que nadie pudo atacar de buena manera. La línea de 5 permitía intercambios constantes entre Cáceres y Varela, permitiendo también subidas de Godín para sorprender al rival. Todo muy rico pero eso duró menos que Josema en cancha.

Alguna cagadita en la salida de Godín y una pisada para el infarto de Muslera, se sumó a un par de buenos ataques del «Team USA» para hacer trabajar al golero celeste y desaprovechar un buen centro cruzado que Ferreira no logró empujar con precisión casi debajo del arco.
El asedio estadounidense era fruto del buen trabajo en el medio del muchachito Musah, el citado trabajo de organización de Pulisic y el soporte de Zimmerman en el fondo, cortando los pelotazos que ya a esa altura Godín o Cáceres tiraban sin pudor.
La entrada de Coates sobre la media hora de juego luego de una nueva lesión de Josema a la hora de esforzarse para cortar un centro desde la derecha del ataque rival, coincidió con la bajada de ritmo del partido. Los últimos minutos volvieron a ser favorables a Uruguay que se sacó al rival de encima y sin muchas ideas claras logró acercarse al arco de Johnson.

El segundo tiempo fue una práctica con público hasta que entraron Valverde, Vecino, Cavani, Rossi y Pellistri (Olivera entró al inicio pero a Obdulio le da vergüenza sumarlo al rubro «cambios que cambian»), y después de soportar a Gorriarán con la «10», a Arambarri y Maxi Gómez, las diferencias entre los nuestros y los norteamericanos fueron notorias (Alonso se pasó de listo e hizo siete cambios generando mareo entre los asistentes, el DT rival y seguro algún «desentendimiento» por la barrera del idioma. No lo culpo, lo he hecho más de una vez en el trabajo y «siga, siga»).
Apenas un tiro de Pulisic y un par de corridas por los laterales ya con Coates jugando solo de zaguero junto a Viña, hablan a las claras de que el partido fue más para probar gente que otra cosa. Todo bien con eso, pero me parece que para el público que hizo el esfuerzo de ir a ver el partido pudo ser algo decepcionante.
De los locales, poquito y nada más.
Tras los cambios Uruguay elevó en algo el ritmo y pareció disponerse a ganar el partido con más intensidad. Olivera tuvo una de las más claras a un metro de la goal line que Johnson le sacó con un poco de suerte y otro tanto de buenos reflejos.
Con Valverde y Vecino se clausuró la entrada rival por los carriles centrales, y desde sus pies surgieron pases para las situaciones más claras de Uruguay.
La última, definida por Cavani en la hora (le corrieron el arco), fue la más clara para poner el 1 a 0 que al final no llegó.
Partido aburridote, jugado a media máquina, casi que domingueando, como Obdulio en este unoxuno:
MUSLERA: No se gastó «cagada» en este partido. Señal inequívoca que NO debe pisar la cancha en la Copa del Mundo.
VARELA: De lo mejorcito de Uruguay en el primer tiempo con sus subidas. Firme en el fondo, criterioso en ataque. A Obdulio le preocupa la cantidad de laterales con exceso de tinta capilar.
CÁCERES: Para no olvidar al Maestro, Alonso lo puso de central y de lateral. Obdulio ya se gastó todos los chistes con él. Espero que no juegue más o haga algo que amerite algún nuevo comentario jocoso.
GODÍN: En un par de saques de arco, de esos cortitos que le gustan al DT, se lo vio intercambiar lo siguiente con Muslera: «Bo, yo te la doy a vos acá y ahora se supone que se la pasamos a alguien de celeste que esté medio cerca. El sorete de Alonso no nos pone a nadie para que se la tiremos a peinar y sacarnos este problema de encima, ¿qué hacemos?». Además de un par de cagadas en la salida, demostró que está para sumar (un lugar en el plantel y sacarse selfies desde el banco).
JOSEMA: Hacía calor, estaban atacando mucho por su zona, sabía que se podían hacer los cambios que se quisiera y después de una barrida cantó lesión. Peñarol inteligencia.
VIÑA: Para jugar de estaca, mejor de zaguero. No paró a nadie.
UGARTE: Buen despliegue, muy solo en el medio.
ARAMBARRI: Flojo match.
GORRIARÁN: Se autopercibe habilidoso, usa la «10» y tira los centros como Cepellini. Obdulio no lo va a criticar mucho por las dudas que lo terminen cancelando los sensibles.
TITÁN NÚÑEZ: Le vienen esos ataques de timidez incomprensibles y no termina las jugadas. A tres partidos de putearlo como cuando empezó en Peñarol.
MAXI GÓMEZ: La vida le sonríe y no le importa nada. Disfrute.
COATES: Paciente suplente que ve como todos se rompen mientras él entra a cubrir compañeros. La calma que transmite mientras juega está en el límite del aplomo profesional y el de un psicópata que en cualquier momento los caga a trompadas a todos.
OLIVERA: Entró para balancear tinta capilar por el otro lateral. Le puso más ganas que Viña y tuvo el gol en sus pies (no familiarizados con la motricidad fina para definir).
ROSSI: Tuvo una clara y por momentos se lo vio jugando de lateral «bis». Espero que tenga un celular con bastante memoria para sacar fotos en Catar.
PELLISTRI: Por el centro no incide tanto.
VALVERDE: Uno lo ve esperando para entrar, observa el físico del que estaba jugando de titular, lo ves tocar dos pelotas y se entiende que el DT estaba rotando el equipo. La diferencias entre los titulares y los que completan el plantel en algunos puestos de la cancha son abismales.
VECINO: Idem Valverde (comparado con Arambarri, Ugarte, Gorriarán y algún otro ciudadano que se gane unos minutitos en algún amistoso. Que no se mal entienda).
CAVANI: No podés errar ese gol, Edin.
Está claro que el DT tiene que manejar el plantel y no puede dejar de darle oportunidades a los jugadores para poder ser evaluados a ritmo de competencia. También es cierto que no es lo mismo demostrar aptitudes en un equipo «B» (no se si tenemos «B», podríamos pasar al «C» sin pudor) que jugando mezclado con los titulares habituales, pero a nivel de selección muchas veces las oportunidades son tan pocas como incómodas y ahí es donde está la chance para aprovechar y ganarse la consideración del mandamás.
Los momentos para probar, cambiar, rotar y sacar conclusiones se van acortando y a criterio de Obdulio el partido con Jamaica será el último donde Alonso podrá probar gente. Ya para la doble fecha de setiembre tendría que apostar por acomodar algo cercano al once inicial vs Corea del Sur y tratar de prepararse de la mejor forma para competir en la Copa.
Obdulio le agradece a todos los que se dieron una vueltita por este modesto espacio para el comentario de los partidos de los esforzados atletas vestidos de celeste y los espera el próximo sábado luego del match vs Jamaica.
Obdulio es siempre titular,
Obdulio son los padres.
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