Marruecos, esa selección que demuestra que «jugar bien» no es solo un tema de posesión de pelota, que «meter» no es patrimonio de algunas geografías y que «no nos quieren por marketing» no está como excusa ante la selección que tiene una máquina de vender publicidad en sus filas.
Ordenado, serio, bien parado en la cancha, Marruecos no se salió nunca de su idea, esa de la que está convencido desde el gran arquero que tiene hasta el último de los suplentes.
Defensa bien parada, un «5» de esos que quiero en mi cuadro y un despliegue fabuloso de un equipo que se ganó sus semifinales con garra, corazón y mucho fútbol, ese que algunos no entienden que puede ser la llave del éxito porque no «luce».
Felicitaciones a Marruecos, primera selección africana en meterse en semifinales en la historia de los mundiales.
Mis respetos a este gran equipo
