Dicen que el verdadero Mundial empieza en los partidos de «ganar o volver a casa» como el de mañana contra los portugueses.
Para mi, el Mundial empieza en el primer partido de Eliminatorias. La ilusión, el deseo de estar en la fiesta máxima del fútbol se refleja en la intensidad con la que se juegan esos partidos clasificatorios, al menos es lo que veo en Sudamérica.
Lo que sí es seguro es que ya la cosa es mano a mano y por la ficha. No habrá tiempo de recuperación si se pierde.
Pero no nos vamos a poner a discutir eso ahora.
Uruguay llega a su cuarto partido de la Copa tras un inicio que generó dudas en cuanto al estilo de juego pero con resultados siempre positivos. Los cambios de Tabárez probando en el medio del campo demuestran esa búsqueda de un estilo con los jugadores adecuados.
El partido contra Rusia pareció mostrar nuestra mejor versión justo antes del momento de la definición. Ganar 3 a 0 fue un golpe importante.
Pero esa visión cortoplacista sería injusta con un proceso de trabajo que más allá de un estilo de juego definido, que puede variar por simples avatares del deporte, se basa en una actitud de grupo asumida y un estilo de conducción claro.
La experiencia de su cuerpo técnico y parte de sus jugadores son el fruto de más de 12 años de trabajo. Por ejemplo, seis de los 23 jugadores del plantel uruguayo tienen más de 100 partidos con la selección (Muslera, Maxi Pereira, Godín, Cristian Rodríguez, Edinson Cavani y Luis Suárez) y sólo 3 no integraron los planteles de selección juvenil. Nada es casual.
Los jugadores de Uruguay podrán jugar mal o bien, pero la entrega, el compromiso y el respeto por la camiseta que se representa no se negocia. Y eso es lo que aprendimos a valorar los hinchas.
Nuestro equipo tiene una gran solidez defensiva que empieza por Suárez y Cavani. La línea de volantes es la que menos tiempo de juego juntos tiene pero están apoyados por la experiencia de Vecino y el orden que Godín les da desde el fondo. Que Muslera tenga el arco en cero aún es más producto del juego colectivo que de las propias atajadas del arquero, que las ha tenido, pero pocas.
El poderío ofensivo puede iniciar en los pies de Muslera. Es que la selección uruguaya tiene varios golpes en su repertorio. A la presencia de dos goleadores de nivel internacional, que además de rematar jugadas son capaces de generar sus propias oportunidades, se le suma el aprovechamiento de las jugadas a balón parado donde el equipo utiliza las cortinas y movimientos de distracción en el área para que se luzcan Godín y Giménez.
Aún no hemos utilizado nuestra jugada de gol patentada: pelotazo de Muslera, peinada a la pasada y gol del delantero que aproveche la segunda pelota. Ya va a llegar y valdrá uno como todos los goles. El que se queje, que no festeje.
Las razones para pensar que estamos en condiciones de ganar el partido van más allá del simple deseo. Hay equipo, hay estilo definido y hay jugadores con experiencia suficiente en este tipo de partidos. Todo una garantía.
Mañana las cámaras estarán apuntando a Cristiano Ronaldo, uno de los mejores jugadores del mundo, que en este campeonato tuvo el atrevimiento de hacer 3 goles en un partido.
Él es el líder del equipo. Su postura en la cancha demuestra que siempre está empujando a los suyos. Ronaldo hace a sus compañeros mejores, ya sea ofreciéndose en espacios que otros ni siquiera imaginan que existen o poniendo ese pase que a veces sorprende a los suyos. Su calidad individual es indiscutible, pero un jugador no se puede destacar si no tiene un equipo que lo respalde.
Alrededor de CR7 aparecen jugadores experientes como Rui Patricio, el arquero, Pepe, ex zaguero del Real Madrid y el veterano Quaresma (contra Irán hizo un golazo a borde externo de pie derecho). El resto son una mezcla de jugadores de mediana edad que han paseado por equipos de segunda línea de Europa y jóvenes que aportan frescura al mediocampo destacándose William.
Tienen velocidad por los costados y buena transición ofensiva. Por momentos su estilo es parecido al que le hemos visto varias veces a Uruguay, entregando la pelota al rival y saliendo bien de contra.
Portugal es el actual campeón de Europa. Le ganaron a Francia la final en Francia y sin CR7 desde los 25 minutos.
Luce como un equipo ordenado, pero los rivales de su serie han demostrado que son vulnerables. España les hizo 3 goles, Marruecos demostró las falencias portuguesas por los laterales, especialmente el derecho, y le ganó varias veces por arriba, pero su carencia de definición les impidió un mejor resultado. Los iraníes también desnudaron carencias defensivas de los portugueses pero tampoco fueron contundentes. Tal vez Uruguay, al igual que España, tiene más herramientas para supuerar a esa defensa.
Otro actor de destaque será el clima de la ciudad de Sochi. Quedó demostrado ante Arabia Saudita que el ritmo del partido fue afectado por el calor y la humedad.
La selección uruguaya ya confirmó la recuperación de Josema Giménez y seguramente vuelva al equipo.
Los probables 11 de Uruguay: Muslera; Cáceres, Josema, Godín y Laxalt; Torreira, Nández Vecino y Bentancur; Suárez y Cavani.
Según FIFA.com Portugal saldrá al campo con Rui Patricio; Cedric, Pepe, Jose Fonte, Raphael Guerreiro, William; Adrien Silva, Ricardo Quaresma, Joao Mario; Goncalo Guedes, Cristiano Ronaldo.
Mañana a la tarde sabremos si tenemos la posibilidad de pasar al grupo de los 8 mejores.
No tenemos idea cual será la historia del partido hasta que termine, pero sí tenemos claro que estos muchachos nos dejarán bien representados más allá del resultado.
Vamo’ arriba Uruguay!
Obdulio analiza,
Obdulio son los Padres